Luigi Bazzoni fue un realizador italiano poco conocido en la actualidad, pero que aportó varios títulos muy interesantes al fantastik. Su primer film parece ser La mujer del lago (La donna del lago, 1965), co-dirigido con Franco Rossellini, un cuento de fantasmas, al parecer, muy atmosférico; después realizó El hombre, el orgullo y la venganza (L’uomo, l’orgoglio, la vendetta, 1968), nada menos que una adaptación del Carmen de Merimée rodado en plan spaghetti-western y con ecos de cine de terror -la procesión de Semana Santa-; tras la que comentamos y Blue gang vissero per sempre felice e ammazzati (1973), un poco conocido western, tenemos otra joya, Huellas de pisadas en la Luna (L’orme, 1974), intriga de ciencia-ficción de escaso presupuesto pero con trama cautivadora.
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La abadía de Berzano 