Sinopsis: Un reputado antropólogo francés es ingresado en urgencias tras ser brutalmente apaleado y herido por un grupo de desconocidos. Antes de morir, dice sus últimas palabras a la doctora que le atiende, Eileen. A partir de ese momento se establece entre ambos una conexión por la que Eileen revive los últimos días en la vida del fallecido. De esta manera descubre que éste había descubierto la existencia de un grupo humano, descrito en antiguas leyendas y escritos, que va de ciudad en ciudad, de país en país, viviendo en la clandestinidad y practicando la violencia como recurso de supervivencia. Dejándolo todo y a todos, Eileen consigue dar con la viuda del antropólogo, con el fin de dilucidar la verdad, pero no es la única, pues los nómadas también están decididos a no dejar testimonios…
Año: 1986 (Estados Unidos)
Director: John McTiernan
Productores: Cassian Elwes, Elliot Kastner, George Pappas
Guionista: John McTiernan
Fotografía: Stephen Ramsey
Música: Bill Conti
Intérpretes: Lesley-Anne Down (Dra. Eileen Flax), Pierce Brosnan (Jean Charles Pommier), Anna Maria Monticelli (Veronique Pommier/Nikki), Adam Ant (Número uno), Héctor Mercado (Ponytail), Josie Cotton (Silver Ring), Mary Woronov (Dancing Mary), Frank Doubleday (Razor), Jeannie Elias (Cassie), Nina Foch (agente del estado), J. Jay Saunders (Cort), Alan Autry (Olds), Dana Chelette (Orderly), Frances Bay (Bertril), Junero Jennings (empleado gasolinera), Athan Karras (gerente de apartamentos), Anita Jesse, Josee Beaudry, Freddie Duke (enfermeras)…
El enorme éxito comercial de Depredador (Predator, 1987) y La jungla de cristal (Die Hard, 1988) propició que, merced a la distribución videográfica, pudiera recuperarse Nómadas (Nomads, 1986), la que fuera la ópera prima de un director, John McTiernan, llamado a establecerse como uno de los renovadores del género de acción, por más que su carrera en cierto momento entrase en barrena, más bien por circunstancias hasta cierto punto ajenas al mundo del cine. No obstante, Nómadas seguramente no es el tipo de película que uno podría situar dentro de los parámetros del cine del realizador, quien, como ya hemos dicho, debe la mayor parte de su justa fama al género de acción. Por el contrario, se trata de una película de ribetes que colindan con el fantástico, casi desde una perspectiva que remite a lo onírico o sobrenatural. En ciertos momentos del film uno no puede dilucidar si lo que vive la protagonista es real o el fruto de la conexión establecida con el difunto Pommier, un antropólogo que descubre la existencia de unos nómadas que vagabundean por la ciudad de noche, sin una ocupación fija y utilizando la violencia cuando les place, algo que vivirá en sus propias carnes cuando éstos se cansen de que les siga por los suburbios de Los ángeles, obsesionado por saber más de sus costumbres y modo de vida.
La película juega muy bien las acciones paralelas entre lo que vivió Pommier y cómo Eileen lo revive con todo el dolor que eso supone. McTiernan se sirve de una puesta en escena muy inteligente, aunque estéticamente adolezca de un tono muy de videoclip de la época, con unas tonalidades tenebristas que a veces funcionan pero otras quedan algo artificiales. Pierce Brosnan, a una década casi de convertirse en James Bond, asume con notable convicción su rol de científico superado por las circunstancias y víctima de la obsesión por conocer la naturaleza de los nómadas urbanos que irrumpen en su barrio en plena noche, pintando mensajes amenazantes en la puerta del garaje de su casa. A la bella Lesley-Anne Down le toca el complicado papel de ser su contrapartida, pero demuestra fuerza y el coraje necesarios para salir del envite con buena nota.
Pese a sus muchos aciertos, el caso es que en el momento de su estreno Nómadas halló escaso apoyo en taquilla, sufriendo un notable batacazo comercial, aunque McTiernan tuvo la suerte de llamar la atención del productor Joel Silver, quien poco más tarde le reclutaría para rodar una cinta de acción y ciencia ficción quizá más convencional, más arriesgada, al servicio de un musculoso austriaco que era uno de los adalides del cine de mamporros en esos años ochenta. Nómadas hallaría acomodo en las estanterías de los videoclubes a primeros de los noventa, siendo rescatada recientemente por el sello Ediciones 79, que la ha vuelto a poner al alcance del espectador menos desprejuiciado y abierto a las rarezas que merecen su oportunidad de ser descubiertas. O apreciadas en su justa medida.
Josep Manel Rosell Subirats
La abadía de Berzano 
Hola,
Esta peli la vi hace bastantes años por la tele y me pareció que tenía un Interesante argumento, aunque al final me decepcionó un tanto pese a ocasionales destellos imaginativos.
La cosa es que el punto de partida es muy bueno y debería haber desembocado en algo fascinante. Sin embargo, y pese a que entretiene, no llega a cotas más altas por la humildad del conjunto.
Pero bueno, como tantas otras, creo que se merece una segunda visión. Ya veré, que me faltan muchas por ver antes.
Un abrazo a todo/as.