Terminator II / Shocking Dark [vd: Terminator II]

Título original: Terminator II / Shocking Dark

Año: 1989 (Italia)

Director: Bruno Mattei [acreditado como Vincent Dawn]

Productor: Franco Gaudenzi

Guionista: Claudio Fragasso [acreditado como Clyde Anderson]

Fotografía: Richard Grassetti

Música: Carlo Maria Cordio

Intérpretes: Christopher Ahrens (Samuel Fuller), Haven Tyler (Sara), Geretta Geretta [acreditada como Geretta Giancarlo Field] (Koster), Fausto Lombardi [acreditado como Tony Lombardo] (Teniente Franzini), Mark Steinborn (Comandante Dalton Bond), Dominica Coulson (Samantha), Clive Riche (Drake), Paul Norman Allen (Kowalsky), Cortland Reilly (Caine), Richard Ross (Price), Bruce McFarland (Parson), Richard Berkeley, John Champion (Científicos), Massimo Vanni [acreditado como Alex McBride], Patricia Sedoc, James Sampson, Robert McFarland (Soldados), Elain Richmond (Presentadora videos), Al McFarland (Raphelson), Jim Pelot (Técnico), Lorenzo Piani, Ernesto Rucker…

Sinopsis: Venecia, en un futuro cercano. Una nube tóxica se ha posado sobre la urbe, aniquilando a su población y convirtiendo a ésta en un lugar inhóspito. Sin embargo, un grupo de científicos trabajan en su subsuelo para revertir la situación y conseguir que la ciudad de los canales pueda volver a ser un sitio habitable. De repente, comienzan a sucederse una serie de extraños ataques a los laboratorios donde se llevan a cabo estos estudios, haciéndose necesaria la intervención de un grupo de rescate que descubrirá una terrible realidad…

Con el mondo Sesso violento, mondo violento (Sesso olocausto) (Idem, 1980), el cine europeo de género asistía al nacimiento de una de las sociedades que más daría que hablar durante los años siguientes. Hablamos de la formada por el director Bruno Mattei y el guionista Claudio Fragasso, cuya unión durante la década de los ochenta daría como resultado una serie de films que, encuadrados dentro de la más zetosa explotation, trataban de sacar beneficio de las modas y éxitos cinematográficos del momento. Robocop, Depredador, Los siete samuráis, Rambo, Zombi… son solo algunos de los títulos de los que estos fotocopistas italianos realizarían sus propias versiones con cintas como Robowar – Robot da guerra (1988), I sette magnifici gladiatori [vd: Los siete gladiadores; tv: Los siete magníficos gladiadores, 1983], o Zombi 3 (1988).

Pero todo en la vida tiene su fin, y la separación profesional de la pareja se produciría en 1989. Según cuenta la leyenda, la causante de esta ruptura fue Terminator II / Shocking Dark [vd: Terminator II], película que, como su título no se molesta en ocultar (ni mucho menos), trataba de adelantarse a la secuela que por aquella misma época preparaba James Cameron de su clásico de 1984 y que no se estrenaría hasta bien mediado 1991. Parece ser que fue Fragasso el que, ante el desastroso resultado de la cinta en cuestión, decidiría poner punto y final a su asociación con quien era poco menos que su mentor. No obstante, esta justificación esgrimida por el entonces joven guionista suena a una ridícula y risible disculpa para justificar de algún modo sus deseos de proseguir su carrera en solitario, que a la verdadera razón que le motivara a adoptar tan drástica solución.

Veamos. Para empezar, la posterior carrera en solitario emprendida por el también conocido como Clyde Anderson, o al menos sus primeros títulos, proseguiría por las mismas pautas por las que se habían venido desenvolviendo sus trabajos junto a Mattei. Como ejemplo, hay tenemos esa Troll II que dirigiera tan solo un año después del título que nos ocupa, una secuela apócrifa de cierto film de John Carl Buechler que figura en diversos listados como una de las cien peores películas de la historia del cine. Pero es que, aparte, esta Terminator II no se diferencia en demasía al resto de títulos que había perpetrado el dúo hasta entonces; más al contrario, si algo se puede decir de ella es que posee un acabado algo superior (tampoco mucho, no exageremos) al acostumbrado, siendo digna de mención su trabajada fotografía.

Así pues, la película responde a todos los ingredientes habituados en las colaboraciones entre Fragasso y Mattei, con unas interpretaciones por parte del desconocido reparto malas e inexpresivas, fragantes errores de continuidad, situaciones ridículas – esos vídeos explicativos de los planes de la conspiradora corporación armamentística… -, penosos efectos especiales, y una narración anodina y por momentos incomprensible, puesta en escena por medio de un montaje con gran sentido del ritmo en el que se repiten tanto planos propios – las imágenes de las “criaturas” -, como material reciclado, en este caso proveniente de la anterior cinta común Double Target (1987).

En cuanto a lo que respecta a su historia, obra, no olvidemos, de Fragasso, de nuevo nos hallamos ante un pastiche argumental en el que se sintetizan diversos elementos sacados de films muy dispares. Y es que, más allá de las esperadas y, hasta cierto punto, inevitables referencias a la cinta a la que se alude en su título, detectables en diversos detalles como el que su protagonista femenina responda al nombre de Sara(h), la presencia de un asesino de apariencia humana y naturaleza androide con media “cara” al descubierto, o la importancia que los viajes en el tiempo adquieren en su discurrir narrativo, la trama de la cinta es un plagio descarado punto por punto y secuencia por secuencia, líneas de diálogo incluidas, a la de otro film de Cameron, Aliens, el regreso (Aliens, 1986), trasladando el marco de acción de la colonia espacial en la que se desarrollaba aquella, a una Venecia devastada por una nube tóxica en un futuro no muy lejano.

Sea como fuere, lo cierto es que su comentada ruptura profesional no provocaría mayores consecuencias en las carreras de ambos cineastas. Como ya ha quedado dicho, a partir de entonces Fragasso simultanearía con mayor asiduidad su faceta de guionista con la de director, orientándose con el tiempo hacia los terrenos del thriller, mientras que Mattei continuaría manufacturando sus propias versiones de cuantas películas exitosas se le pusieran a tiro. Sin ir más lejos, en el año 2007 volvería a realizar una cinta cuyo esqueleto argumental es sospechosamente parecido al de Aliens, el regreso, titulada Zombi: la creazione, y que a la postre se convertiría en su última película, ya que poco después de su finalización fallecería a causa de un tumor cerebral.

José Luis Salvador Estébenez